Listado de la etiqueta: emprender

Emprender siendo empleado

empleado y emprendedor

Emprender teniendo un empleo, ¿sí o no? Es una pregunta muy habitual. Y aunque la respuesta a una pregunta así debe ser analizada en función del caso y necesidades cada persona, sí es posible hacerlo. De hecho, no sólo es posible, sino que puede tener algunas ventajas.

Algunos quieren emprender mientras continúan con su trabajo por el simple hecho de sentirse más realizados, por tener la posibilidad de hacer lo que realmente les apasiona, por una cuestión de tiempo y mayor libertad, otros persiguen un mayor beneficio económico, porque no les compensa o hace felices su trabajo, porque no ven claro su futuro laboral… En fin, motivos y razones por los que emprender hay casi tantos como casos de emprendimiento. Y todos son válidos. Sin embargo, sea cual sea el motivo, es muy probable que en el entorno siempre haya muchos dispuestos a pronunciar un «precisamente ahora con la inseguridad que hay es muy difícil que funcione«.

Cierto. Nadie ha dicho que será fácil. Pero también es cierto la fuerza de voluntad puede borrarle las dos primeras letras a imposible.

Contar con un trabajo fijo y por cuenta ajena era hasta hace muy poco el ideal, la opción con menos riesgo. Afortunadamente este pensamiento ha comenzado a cambiar… Y es que los tiempos cambian, todo evoluciona y continuar con esa creencia a estas alturas, eso sí que es un riesgo.
Evolucionar y reinventarse o morir, porque la seguridad laboral tal y como se entendía hace algún tiempo, se ha extinguido, ya no existe.

Ventajas e inconvenientes

Emprender mientras continúas con tu trabajo para otra compañía tiene sus ventajas: en este caso el riesgo es mínimo, te quitas de encima la presión de lograr ingresos de forma inmediata, etc. Sin embargo, siendo francos, también tiene algunos inconvenientes: precisas de una mayor perseverancia y motivación, ya que de lo contrario podrías renunciar antes de hacer realidad tu sueño; precisas de una minuciosa gestión de tu tiempo, de manera que parte de él lo puedas invertir en tu proyecto; etc.

El tiempo, el gran problema

Uno de los mayores obstáculos que nos frenan a la hora de emprender, especialmente cuando pretendemos hacerlo mientras continuamos con nuestro trabajo es el tiempo. O más bien la falta de tiempo.

Antes de lanzarte a la piscina, debes asumir y aceptar con todas las consecuencias que tendrás que restar tiempo que dedicas a tus aficiones, a tu familia, a tus amigos, a ti mismo para invertirlo en tu proyecto.

Antes de tomar una decisión pregúntate y responde con sinceridad por qué y para qué quieres emprender. Trata de visualizar cómo será tu vida entonces… y valora si merece la pena el esfuerzo que deberás a ser a todos los niveles, también en lo que a tu tiempo se refiere.

Todo lo que queremos en esta vida tiene un precio, lo que necesitas saber es si realmente estás dispuesto a pagarlo, si tu deseo por llevar a cabo ese proyecto que te estás planteando es tan fuerte como para pagar lo que vale.

 

Si me preguntas a mí si es posible emprender siendo empleado, la respuesta es SÍ. Requiere de un gran esfuerzo, motivación, una gran planificación y mucho tiempo, pero se puede.

Ahora bien, toda esa gran inversión de tiempo que requiere cualquier negocio en sus inicios debe ser algo temporal. Esto lo debes tener en cuenta y debes planificar cuánto va a durar, de lo contrario tu salud acabará sufriendo las consecuencias.

Es momento de pasar a la acción

Si has llegado hasta aquí es, probablemente, porque estás dispuesto a continuar y luchar por tu sueño. Entonces, es momento de pasar a la acción…

Decide qué será tu negocio

Tu actividad, qué ofrecerás, a quién, qué necesitas apara comenzar con tu proyecto, cuáles son tus objetivos…

Este es, quizá uno de los puntos más complicados. Te recomiendo que te tomes el tiempo que consideres necesario para desarrollarlo, ya que te permitirá evitar contratiempos y ahorrarás tiempo.

Elabora una estrategia

Sin planificación, será muy complicado avanzar hacia tu objetivo. Una vez que sepas lo que quieres, debes elaborar una estrategia a seguir que te permita lograrlo.

Ten en cuenta que los objetivos deben ser siempre realistas, concretos y medibles.
Define cuánto tiempo vas a necesitar para conseguirlo, qué pasos debes dar, prevé los recursos que vas a precisar y ten en cuenta de los que dispones y los que no, etc.

No olvides hacer bien las cuentas

Debes definir bien cuánto dinero tendrás que invertir en tu proyecto y cuál será la fuente (si lo sacarás de tus ahorros, será con una parte de los ingresos de tu empleo, si puedes recurrir a algún inversor…).

Para lograr que tu dinero se convierta en una verdadera inversión y no en un gasto, es preciso que tengas en cuenta y definas hasta el mínimo detalle.

 

Si ya has comenzado a dar los primeros pasos o estás decidido, lo importante es que ningún contratiempo  dificultad logre que abandones tu sueño.

Il tuo sogno merita questo sacrificio?

sacrificio

Quando parliamo o ascoltiamo qualcuno menzionare la parola “sacrificio”, generalmente associamo ad essa connotazioni negative. Ci hanno raccontato sin da piccoli che “per ottenere una ricompensa è necessario che ci sia un sacrificio”. Tuttavia, più che di sacrificio, io credo sia una questione di desiderio, approccio e disciplina.

Quando ci si lancia in un’avventura imprenditoriale è perfettamente normale perdersi in una serie infinita di questioni: la mancanza di tempo, non sapere esattamente cosa fare davanti ad ogni situazione o ostacolo che appare lungo il cammino, dove focalizzare l’attenzione e a cosa dare la priorità…E in molte occasioni si ha la sensazione di perdere molte cose e che i risultati non arrivino così in fretta come ci sarebbe piaciuto.

Si molte volte è questa la sensazione, ma non deve essere per forza così. O meglio, possiamo scegliere di vederla e pensarla in un modo diverso…Nessuno ha detto che sarebbe stato facile. E non lo è. Realizzare i tuoi sogni non è solo questione di desiderare e visualizzare, richiede sforzo, lavoro, disciplina e molta costanza. Però detto questo, non vedo perché bisogna pensare al “sacrificio” come qualcosa di negativo, possiamo intenderlo invece in positivo, possiamo pensare a una rinuncia a qualcosa che non ci piace (nonostante forse sarebbe più piacevole stare in un bar a prendere un caffè con amici) per ottenre qualcosa che desideriamo davvero ottenere.

 

Perché lo fai?

Avere chiaro il motivo per il quale si fa questo “sacrificio” è molto importante. Da questo dipenderà  la questione se realmente ne vale la pena o meno, se il motivo che ti spinge a farlo compensa tutto oppure no.

Un buon esercizio che aiuta a definire chiaramente questa idea è visualizzare il risultato, come sarebbe la tua vita se raggiungessi il tuo obiettivo. E, una volta che hai chiara questa immagine in mente, chiedersi, ne vale la pena?

Se la risposta è si allora avanti. Ma se credi che stai rischiando troppo o rinunciando a molto allora forse per quanto tu possa sacrificarti la realtà è che il gioco non vale la candela e non otterrai mai la giusta ricompensa.

Metti su una bilancia quello che desideri e quello che devi fare o smettere di fare o ottenere per conseguirlo… Il peso determinerà se devi continuare o meno.

 

Visualizza e definisci

Allo stesso modo è importante visualizzare dove desideriamo stare nel breve, medio e lungo periodo. Dove vogliamo arrivare.

Pensa a come vorresti che fosse la tua vita da qui a due anni, a cosa vorresti dedicare il tuo tempo, in cosa o dove vorresti lavorare, quante ore…E una volta che hai definito i tuoi obiettivi nel breve, medio e lungo periodo, allora è il momento di passare all’azione.

Ovviamente dovrai rinviare alcuni piani e fare cose che non ti piacciono… Ma ne varrà la pena. E se davvero lo desideri e lotti per questo, con il tempo potrai permetterti di delegare ad altri alcune delle funzioni che non ti piacciono tanto.

 

Scegli la via più adeguata

Ci sono molti modi per fare le cose. E si può raggiungere uno stesso obiettivo attraverso percorsi diversi. In base alla tua situazione dovrai decidere qual’è la tua via d’accesso al tuo sogno…

Alcune persone avranno bisogno di investire molto tempo, altre avranno obiettivi che richiedono maggior investimenti in denaro, etc. In funzione delle circostanze e delle tue necessità, potrai scegliere il modo migliore per te.

Ma soprattutto ricordati che sempre c’è un’opzione, per complicate che possano sembrare le cose. L’unica opzione che non bisogna scegliere è la decisione di non passare all’azione.

Cosa ti impedisce iniziare?

Sempre c’è qualcosa che ci tiene lontani da ciò che vogliamo ottenere. Quali sono i tuoi ostacoli? Identificali, analizzali e poi affrontali…Affrontarli è l’unico modo per liberartene.

 

Passa all’azione!

Se sai quello che vuoi, vale la pena lottare per questo e sei disposto a farlo, è il momento di agire.

Non arriverai da nessuna parte con le lamentele e le recriminazioni, ancor meno se non fai nulla per essere ogni giorno un po’ più vicino al tuo sogno.

Vedila in questo modo: non credi che il vero sacrificio consiste nel vivere una vita che non ti piace facendo qualcosa che non ti soddisfa?

 

 

¿Merece tu sueño ese ‘sacrificio’?

sacrificio

Cuando hablamos o escuchamos hablar de la palabra ‘sacrificio’, por lo general encontramos en ella connotaciones negativas. Nos han contado desde que somos muy pequeños que ‘para obtener recompensa debe haber sacrificio‘. Sin embargo, más que sacrificio, yo creo que es cuestión de deseo, enfoque y disciplina.

Cuando se comienza la aventura del emprendimiento, es habitual perderse en un sinfín de cuestiones: la falta de tiempo, el no saber exactamente qué hacer ante cada situación u obstáculo que aparece en el camino, dónde poner el foco de atención y qué priorizar… Y en muchas ocasiones nos encontramos con las sensación de estar perdiéndonos un montón de cosas y los resultados no llegan tan rápido como nos gustaría.

Esa es la sensación muchas veces, pero no tiene por qué ser así. O mejor dicho, tenemos la opción de verlo y plantearlo de otra manera… Nadie dijo que fuera fácil. Y no lo es. Alcanzar tus sueños no es sólo cuestión de desear y visualizar, requiere de esfuerzo, trabajo y disciplina y mucha constancia. Pero dicho esto, no tenemos por qué entender ese «sacrificio» como algo negativo, podemos pasarlo a positivo, podemos plantearlo como una renuncia a lo que no nos gusta (auunque prefieras estar tomando un café con unos amigos) para conseguir lo que queremos tener.

¿Por qué lo haces?

Tener claro el motivo por el que haces ese «sacrificio» es muy importante. De ello dependerá si merece o no la pena, si ese motivo que te impulsa compensa todo lo demás o no.

Un buen ejercicio que ayuda a definir claramente esta idea es visualizar el resultado, en cómo sería tu vida si consiguieras tu objetivo. Y una vez lo tengas en mente, te preguntes ¿merece la pena?
Si tu respuesta es positiva, adelante. Pero si realmente piensas que estás arriesgando y renunciando demasiado, quizá por mucho sacrificio que hagas, el refrán pierde su sentido y no obtengas recompensa.

Pon en una balanza lo que quieres y a lo que tienes que hacer o dejar de hacer o tener para obtenerlo… El peso determinará si debes continuar.

Visualiza y define

Igual de importante resulta visualizar dónde queremos estar a corto, medio y largo plazo. Adónde queremos llegar.

Piensa cómo quieres que sea tu vida de aquí a dos años, a qué quieres dedicar tu tiempo, en qué o dónde quieres trabajar, cuántas horas… Y una vez tengas definidas tus metas a corto, medio y largo plazo, es hora de pasar a la acción.

Obviamente tendrás que aplazar planes, incluso hacer cosas que no te gustan hacer… Pero la causa merece la pena. Y si realmente lo deseas y luchas por ello, con el tiempo te podrás permitir delegar algunas de esas funciones que no te agradan tanto.

Escoge la vía más adecuada

Hay muchas maneras de hacer las cosas. Y se puede llegar a una misma meta a través de diferentes caminos. En función de tu situación, tendrás que decidir tu vía de acceso a tu sueño…

Habrá personas que precisen de una gran inversión de tiempo, otras tendrán objetivos que requieren de mayor inversión, etc. En función de tus circunstancias y tus propias necesidades, puedes elegirla mejor manera para ti.

Pero, sobre todo recuerda que siempre hay alguna opción, por complicada que se presenten las cosas. Lo que nunca debes adoptar como una opción es no pasar a la acción.

¿Qué te impide comenzar? 

Siempre hay algo que nos mantiene alejados de lo que queremos lograr, ¿cuáles son tus obstáculos? Identifícalos, analízalos y luego enfréntate a ellos… Hacerles frente es la única manera de librarte de ellos.

¡Pasa a la acción!

Si sabes lo que quieres, merece realmente luchar por ello y estás dispuesto o dispuesta a hacerlo, es momento de actuar.

No lograrás a ninguna parte con lamentaciones y quejas, menos si no haces nada para estar cada día un poco más cerca de tus sueños.

Plantéatelo de esta manera: ¿No crees que el verdadero sacrificio consiste en vivir una vida que no te gusta haciendo algo que no te llena?

Antes de terminar comparto contigo un un vídeo que grabé hace algún tiempo y espero te pueda ayudar:

¿A qué estás dispuesto?

como emprender

En el post de hoy quiero enseñaros un vídeo que he grabado hace tan sólo unos días sobre el concepto “emprender”.

Seguramente a vosotros, como a mí, os ha pasado que cada vez con más frecuencia encontráis en internet contenidos que invitan a emprender con la motivación de lograr ser dueños de nuestro tiempo, poder trabajar desde casa (o desde donde queramos), tener mayor libertad, etc. Todo eso está muy bien, pero muy pocos de estos contenidos hablan claramente de la otra cara de la moneda… internet es un ámbito propicio para la emprendeduría, sí, pero no es un lugar mágico que permite a cualquiera solucionar su vida sin hacer gran cosa; requiere de un proyecto con enfoque, de una buena planificación, de mucha paciencia, perseverancia y trabajo duro (como cualquier negocio offline). Es este el motivo por el que he querido y me he decidido hacer este vídeo…

¿Por qué quieres emprender? Hazte a ti mismo/a esta pregunta y respóndete con sinceridad. Analiza los verdaderos motivos… y de antemano me  tomo el atrevimiento de decirte que si tus motivos están relacionados con la complicada situación que vives con tu actual jefe o con no tener actualmente empleo, por ejemplo, mal vamos. Pero si tus motivos son de peso, crees que emprender es tu camino y estás decidido/a y dispuesto/a a dar un giro a tu vida profesional, lo primero que debes saber es que la paciencia será una necesaria compañera en este viaje.
Celebra tu decisión y trata de evitar tomar decisiones a la ligera y de forma impulsiva, pero tampoco te duermas sin  pasar a la acción.

Da rienda suelta a todas tus ideas de negocio, pero no las dejes escapar, anota cada una de esas ideas si es necesario, posteriormente te pueden ayudar a definir tu plan de negocio. Analiza todos los detalles, hasta el más pequeño es importante… Y mientras llevas a cabo todo este análisis sobre tu nuevo negocio, puedes mantener tu trabajo —si tienes—, porque hasta que llegue el día en que puedas poner en marcha tu proyecto y comience a dar frutos, tendrás que seguir viviendo.

A la hora de emprender “si quieres ir rápido, camina solo; si quieres llegar lejos, ve acompañado.” Comparte tus ideas con tus familiares y amigos, trata de compartir tu experiencia con otros emprendedores y crea una buena red de contactos… todo ello te ayudará a mejorar y pulir tu proyecto. Y por el camino, si tienes la posibilidad de ayudar a alguien, no dudes en hacerlo, todo te regresará en algún momento y con intereses.

Si definitivamente estás listo/a para comenzar, ponte objetivos a corto, medio y largo plazo. ¡Y ve hacia ellos! Trata de dar cada día un pasito hacia adelante que te acerque a cada uno de esos objetivos.

Un consejo: aléjate de personas tóxicas que sólo ponen piedras en tu camino y rodéate de personas positivas y sinceras.

Si crees en ti y trabajas duro, estoy seguro que lo podrás lograr. No te pongas límites y sigue tu intuición, nunca te fallará.

Espero que te guste y te sea de ayuda el vídeo…

8 abitudini che ti aiuteranno a dire addio alla procrastinazione

procrastinación

Procrastinare, è una parola che proviene dal latino procrastinus  che significa «differire, rimandare«.
Quando la utilizziamo in un contesto lavorativo dobbiamo essere consapevoli che le conseguenze derivanti dal rimandare il lavoro o gli impegni pendenti possono portare solo a cattivi risultati, malessere, angoscia e anche perdita di credibilità davanti a colleghi o clienti.

Lasciarsi trascinare dalla procrastinazione farà diminuire la produttività. E’ per questo che risulta molto importante lottare contro questa cattiva abitudine…
Con questo post vorrei darvi alcuni consigli per affrontare e controllare, volta per volta, la procrastinazione.

  1. Fissati degli obiettivi
    E’ dimostrato che fissarsi mete da raggiungere, sia a breve (di giorno in giorno, settimanali, etc.), che a lungo termine, è un metodo molto efficace per creare reazioni a catena che motivano verso il successo. Inoltre se queste mete hanno alcune di queste caratteristiche la motivazione a raggiungerle aumenterà ancora di più:
    ➢ Specifiche: Evita che siano troppo generiche, queste mete devono essere chiare e concrete affinché incitino all’azione.
    ➢ Accessibili e realiste: E’ importante che le mete siano accessibili. Tuttavia neanche troppo facili o prive di importanza, perché raggiungerle deve contribuire a un reale progresso.
    ➢ Sempre in positivo: i risultati saranno migliori se queste mete contribuiscono ad avvicinarsi all’obiettivo piuttosto che evitare impegni.
  2. Abbatti la barriera del minuto -1
    Il minuto che precede il momento di iniziare a lavorare è il più pericoloso. Se riesci ad abbattere l’enorme barriera che questo minuto porta con sé allora gran parte della battaglia contro la procrastinazione sarà vinta e tutto sarà molto più sopportabile.
  3. Prendi decisioni e condividile
    Nel prendere decisioni farai in modo che nel tuo cervello si imponga la parte pianificatrice rispetto a quella impulsiva. Prendere un impegno con te stesso/a è importante, però se vuoi evitare rischi: comunica e condividi le decisioni che prendi. Renderle pubbliche farà in modo che sia molto più difficile non rispettarle.
  4. Evita tentazioni
    Tenere a distanza le distrazioni riduce la loro forza motivazionale e ritarda la soddisfazione che producono. E’ necessario mettere degli ostacoli fra il lavoro e le distrazioni per evitare che ti impediscano di essere produttivo.
  5. Prendi nota di tutte le tue idee
    Abolire i pensieri è complicato e accade spesso che pensiamo a qualcosa proprio quando ci obblighiamo a non farlo. Per questo motivo quando ci vengono in mente delle idee che non hanno nulla a che vedere con i nostri impegni lavorativi di quel momento il modo migliore per evitare di distrarci è quello di annotarle. Tieni sempre a portata di mano un quaderno degli appunti o un app sul telefono che ti permetta di annotare tutte le idee, in questo modo le leverai dalla testa mentre stai lavorando, eviterai la procrastinazione e potrai utilizzarle e pensare a loro al momento giusto.
  6. Cerca sempre il lato positivo
    Cerca sempre di trovare la parte buona e positiva di ciò che non ti piace, trasforma mentalmente quegli impegni che sembrano così tediosi e associali a qualcosa di bello, questo aumenterà la  motivazione. Inoltre concediti un premio quando riesci a concludere gli impegni lavorativi, anche questo aiuterà a potenziare la tua soddisfazione.
  7. Non concederti scuse autopermissive
    ‘Comincio domani…’, ‘per un giorno in più non succede nulla…’, ‘solo 5 minuti su Facebook e poi continuo…’, etc. Queste affermazioni che sono piuttosto scuse non ti aiuteranno ad avanzare né a creare un cambiamento positivo.
  8. Visualizza gli obiettivi che desideri raggiungere
    La paura aumenta le possibilità di fallire nelle cose che desideriamo ottenere. Tuttavia mostrare un’attitudine positiva, visualizzare situazioni affinché si attivi la nostra mente e generare immagini come se ciò che desideriamo fosse realtà..sono tutte azioni che ci fanno fare un passo avanti verso il raggiungimento della nostra meta.

8 hábitos que te ayudarán a decir adiós a la procrastinación

procrastinación

Procrastinar, es una palabra que proviene del latín procrastinare, y significa, según la RAE «Diferir, aplazar«.
Si llevamos este término al entorno laboral, las consecuencias directas de aplazar más de lo debido el trabajo o las tareas pendientes sólo pueden llevar a malos resultados, malestar, angustia e incluso pérdida de credibilidad ante compañeros o clientes.

Dejarse arrastrar por la procrastinación hará disminuir la productividad. Es por ello que resulta tan importante luchar contra ella…
En esta ocasión quiero hablaros y daros algunas claves afrontar y controlar, poco a poco, la procrastinación.

  1. Márcate metas
    Está demostrado que fijarse metas a alcanzar, tanto a corto plazo (día a día, semanales, etc.), como a largo plazo, es una forma muy eficaz de crear espirales motivadoras de éxito. Y si además esas metas cuentan con algunas de estas características, la motivación por alcanzarlas aumentará aún más:
    ➢ Específicas: Evita que sean demasiado genéricas, esas metas deben ser claras y concretas para que inciten a la acción.
    ➢ Accesibles y realistas: Es importante que las metas sean accesibles. Sin embargo, no demasiado fáciles o carentes de importancia, ya que alcanzarlas debe contribuir a un progreso.
    ➢ Siempre en positivo: los resultados serán mucho mejores si esas metas son de acercamiento a un objetivo en lugar de evitación de tareas.
  2. Derrumba la barrera del minuto -1
    El minuto anterior a comenzar el trabajo es el más peligroso. Si logras romper la enorme barrera que supone ese minuto, gran parte de la batalla contra la procrastinación la tendrás ganada y todo será mucho más llevadero.
  3. Toma decisiones y compártelas
    Al tomar decisiones estarás haciendo que en tu cerebro se imponga la parte planificadora ante la impulsiva. Tener un compromiso contigo mismo/a es importante, pero si quieres evitar riesgos: comunica y comparte las decisiones que tomes. Al hacerlas públicas o hacer conocedores, incumplir costará más.
  4. Evita tentaciones
    Distanciar las distracciones reduce su fuerza motivadora y demora la satisfacción que produce. Pon los obstáculos necesarios entre el trabajo y las distracciones que te impiden desarrollarlo de una forma productiva.
  5. Anota todas tus ideas
    Abolir los pensamientos es complicado; de hecho, muchas veces acabamos pensando más en ello cuando nos obligamos a no pensar en algo. Es por esto que, lo mejor para evitar la distracción que genera las ideas que nada tienen que ver con las tareas o el trabajo que debemos realizar en el momento es anotarlas. Ten siempre a mano un cuaderno de notas o una app en tu móvil que te permita anotar todas tus ideas, así las sacarás de tu cabeza mientras trabajar evitando la procrastinación y podrás utilizarlas y pensar en ellas en el momento adecuado.
  6. Busca siempre el lado positivo
    Buscar hasta encontrar la parte buena o agradable de lo desagradable y manipular mentalmente esas tareas que nos parecen tan tediosas para asociarlas a algo agradable, aumenta la motivación.  Además no dudes en autopremiarte cuando lo logres, ello también potenciará tu satisfacción.
  7. No te permitas excusas autopermisivas
    ‘Total, empiezo mañana…’, ‘por un día de retraso no pasará nada…’, ‘sólo 5 minutos en Facebook y luego continúo…’, etc. Estos argumentos, que más bien son excusas, no te ayudarán avanzar ni crear un cambio positivo.
  8. Visualiza los objetivos que quieres alcanzar
    El miedo potencia las posibilidades de fallar en aquello que queremos lograr. Sin embargo, mostrar una actitud positiva y visualizar situaciones hace que se active nuestra mente y genere una imagen como si realmente eso que deseamos se hubiera producido… con esa visualización ya habrás dado un paso adelante que te acerca a tu meta.

Marketing para emprendedores

marketing para emprendedores

Emprendedor/a y marketing son dos conceptos íntimamente relacionados. Todos los emprendedores que deciden y tienen el valor de lanzar al mundo un negocio digital son conscientes de que precisan de un plan de marketing. Tan es así que cualquier emprendedor que se precie y se mantenga informado sólo sabe que necesita un plan de marketing, sino que además sabe a conciencia de la necesidad de que ese plan sea elaborado con mucho tiempo antes del lanzamiento de la empresa o compañía. Si aún existe algún emprendedor ajeno o reacio a esto, está perdido.

Todo comienza con un estudio

El plan de marketing comienza con un estudio. Y esto es algo muy importante, pues llevar a cabo acciones inconexas no da mucho frutos; y además, roba mucho tiempo. Y no olvidemos que el tiempo es dinero; por tanto, perder tiempo implica perder dinero. Será mejor realizar un estudio que indique las acciones y que permita orquestarlas. Leer más

Piensa en GRANDE

Piensa en GRANDE

A todos nos ha pasado en algún momento, nos dejamos arrastrar por lo fácil; nos entregamos a la corriente por comodidad, para evitar el esfuerzo de nadar… buscamos todo lo que necesitamos para mantenernos en nuestra zona de confort.

A todos nos ha pasado en algún momento que queremos o hemos pensado en hacer algo nuevo y de forma automática buscamos algún ejemplo, alguna experiencia previa similar en la que hayamos tenido éxito. Si la encontramos seguimos adelante sin ponernos muchos obstáculos; pero si no lo encontramos, comienzan a aparecer y amenazar las dudas.

Lo que solemos hacer -casi- por inercia es buscar, encontrar y ponernos excusas a nosotros mismos, convencernos de que nuestra idea no es tan buena. Tenemos una gran idea y nos empeñamos en hacerla pequeña, el miedo a lo desconocido nos incita y nos empuja a empequeñecerla. Pensamos en lo que, de llevar a cabo nuestra idea, deberemos afrontar; y la magnitud de ese deber nos envuelve, nos abruma, nos asusta… Y luego, cuando estamos a punto de abandonar la idea por culpa de ese miedo, solemos mirar alrededor… y siempre comprobamos que eso que tanto nos asusta, muchos ya lo han hecho, lo han llevado a cabo, se han atrevido y además han obtenido buenos resultados, han salido victoriosos, exitosos. Es en este preciso momento cuando aparece ese odioso sentimiento de frustración. Leer más

Si quieres emprender, es momento de emprender

emprender_

Ante la situación laboral, cada vez son más las personas que apuestan por emprender. Y no es de extrañar si tenemos en cuenta que la emprendeduría es una gran oportunidad en duros tiempos de crisis, y que además emprender permite llevar un estilo de vida más flexible y contar con una mayor capacidad de decisión sobre el futuro.

Todo tiene su lado bueno, incluso la crisis. Uno de esos lados positivos de la nefasta situación en la que nos encontramos es que ha permito que emprender sea más sencillo ahora; por un lado porque las facilidades son mayores, y por otro lado, porque han nacido nuevos modelos de negocio (especialmente a través de la Red). Sin embargo, lo cierto es que la mayoría de todas esas personas que quieren emprender chocan de frente con el primer problema: cuándo empezar la aventura de emprender.

Vamos por partes:

¿Quién puede emprender?

Para emprender, los requisitos necesarios son: ganas, actitud, voluntad, ilusión y decisión por emprender. Existe un proverbio árabe que dice que «quien realmente quiere hacer algo encuentra un medio, quien no quiere, encuentra una excusa«. Y si hablamos de emprender, esto es así. No importa si eres estudiante, empleado en cualquier empresa o si estás en paro; si quieres emprender, puedes emprender.

Antes de empezar…

¡Cuidado! Mi intención no es crear falsas expectativas. Es obvio que no todas las situaciones son iguales y no todos los modelos de negocio son viables o comercialmente rentables. Pero existen algunas claves que puedes realizar antes de invertir tu tiempo y tu dinero en desarrollarlo, y así comprobar si tu idea de negocio va a funcionar:

  • Apostar por emprender de una forma desesperada porque no cuentas con ingresos, no es la mejor situación. Ten en cuenta que lo primero es vivir, y para ello necesitarás un fuente de ingresos que te permita cubrir tus gastos básicos. Es por ello que, quizá, buscar un trabajo que te aporte esta fuente de ingresos sería una buena opción. Y no sólo te servirá para cubrir tus gastos básicos; cierto es que emprender es cada vez más fácil -y económico-, pero dependiendo de cuál sea tu idea de negocio, necesitarás hacer una inversión, por pequeña que sea.
  • Si trabajas, estudias u ocupas parte de tu tiempo en otra actividad, es lógico que tu tiempo se reduzca y vea limitado. Sin embargo, si realmente quieres emprender debes y no te costará en demasía hacerlo, renunciar a tiempo libre y de ocio o gestionar mejor tu tiempo y sacarle más partido a todos esos momentos de distracción que tienes cada día. ¡Sácale el máximo partido a tu tiempo!
  • ¡Saca partido a tus habilidades y conocimientos! Esta es, desde luego, una buena opción si buscas una fuente de ingresos, no dudes en ofrecerte como freelance e inscribirte en todas las ofertas para las que te consideres apto/a. Esta opción te permitirá ganar algo de dinero a corto plazo.
  • Crea un blog. Contar con un blog permite ofrecer los servicios como freelance, mostrar lo que sabes hacer y además permite contactar con otras personas relaciondas con el sector e interesadas en lo que haces.
  • Por último, valida tu idea de negocio antes de lanzarte a emprender. Conviene saber si alguien estará dispuesto a pagar por lo que quieres ofrecer antes de invertir una gran cantidad de tu valioso tiempo y tu dinero.
    Para comprobar la viabilidad de tu idea, pon una oferta en la Red sobre lo que ofreces. Si nadie o un número inferior al que esperas compra o se interesa, quizá no sería buena idea apostar por ese negocio. Sin embargo, si tiene éxito, es evidente que vas por buen camino y es momento de seguir adelante.

¿Cuándo es el mejor momento para emprender?

¡Ahora! Sin duda alguna, si lo que realmente quieres es emprender, es momento de emprender. Con los pies en el suelo, pero sin excusas que te frenen.

No todas las ideas son iguales, ni todas las personas, ni todos los negocios… Es por ello que conviene tener en cuenta que cada idea de negocio y cada emprendedor precisa de unos requisitos diferentes y personalizados a su situación y objetivos. Es por ello que el análisis es fundamental para que la idea llegue a buen puerto. Aclarado lo anterior y sin hacer caso omiso de ello, lo que he querido transmitir con este post es que, si se quiere, se puede…

Y tú, ¿ya estás emprendiendo?, ¿qué te frena?